jueves, 22 de febrero de 2007

FELICIDADES

Existe una planta con propiedades narcóticas y un cierto parecido al cuerpo de un humano atrofiado, que ha sido durante años el lugar de encuentro para muchos artistas en La 2 de Televisión Española. Me refiero a “La Mandrágora”, un programa dedicado exclusivamente al mundo de las artes escénicas que el martes cumplió su décimo aniversario y 475 emisiones.

Su actual presentadora,
Rocío Muñoz (El comisario), lo celebró acompañada de José Sacristán, Ana Labordeta, música hip hop árabe y por supuesto, de una tarta con velas. Invitó al público a pedir un deseo. Le hice caso, pero no daré detalles para que la magia del secreto haga que se cumpla. Aún así, mi más enérgica enhorabuena para los creadores del formato, que han conseguido mantener en antena un producto muy sencillo, con un valor cultural impresionante y de alta necesidad para el público.

Reconozco que lo descubrí tarde, pero una vez que entré en su juego, no he parado. El único problema que le veo yo y, también, gran parte del mundo del espectáculo es el horario. Se emite muy tarde, sobre las 00:45, cuando la gente pretende dormir. ¡Ay, Cultura, qué difícil te lo ponen para exhibirte!

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